León
Felipe (3)
Sus
obras y Algunos poemas
Sus
Obras:
Versos
y oraciones del caminante (1920-1929)
Versos
y oraciones del caminante II (1929)
Drop
a Star (1933)
La
Insignia (1936)
El
payaso de las bofetadas (1938)
El
Pescador de caña (1938)
El
Hacha (1939)
Español
del éxodo y del llanto (1939)
El
gran responsable (1940)
Traducción
de Canto a mi mismo (Walt Whitman9 (1941)
El
poeta prometeico (1942)
Canto
a mi mismo (1943)
Ganaras
la luz (1943)
Parábola
y poesía (1944)
España
e Hispanidad (1947)
Llamadme
publicano (1950)
El
Ciervo (1954)
¿Qué
se hizo el rey don Juan? (1962)
Como
tú… (1962)
Rocinante
(1967)
Oh
este viejo y solo violín (1968)
En
1963 aparecieron en Buenos Aires sus Obras Completas
Lee en: DROP A STAR - Poemas de León Felipe http://www.poemas-del-alma.com/leon-felipe-drop-a-star.htm#ixzz2eA6hx8xS
EL
DOLOR
No he venido a cantar
No he venido a cantar, podéis llevaros la guitarra.
No he venido tampoco, ni estoy aquí arreglando mi
expediente
para que me canonicen cuando muera.
He venido a mirarme la cara en las lágrimas que caminan
hacia el mar,
por el río
y por la nube…
y en las lágrimas que se esconden
en el pozo,
en la noche
y en la sangre…
He venido a mirarme la cara en todas las lágrimas del
mundo.
Y también s poner una gota de azogue, de llanto,
una gota siquiera de mi llanto,
en la gran luna de este espejo sin límites, donde
me miren y se reconozcan los que vengan.
He venido a escuchar otra vez esta vieja sentencia en las
tinieblas:
Ganaras el pan con el sudor de tu frente
“y la luz con el dolor de tus ojos”
Tus ojos son las fuentes del llano y de la luz.
REVOLUCIÓN
Siempre habrá nieve altanera
que vista el monte de armiño
y agua humilde que trabaje
en la presa del molino.
Y siempre habrá un sol también
-un sol verdugo y amigo-
Que trueque en llanto la nieve
Y en nube el agua de río.
PIEDRA
DE SAL
Tú estabas dormida
como el agua que duerme en la alberca…
y yo llegué a ti
como llega
hasta el agua que duerme
la piedra.
Turbé tu remanso y en ondas de amor te quebraste
como en ondas el agua que duerme se quiebra
cuando
llega
a turbar su remanso dormida
la piedra
Piedra fui para ti, piedra soy
y piedra quiero ser, pero piedra
blanda de sal
que al llegar a ti se disuelva
y en tu cuerpo se quede
y sea
como levadura de tu carne
y como el hierro de la sangre de tus venas.
Y en tu alma deje una sed infinita
de amarlo todo… y una belleza
insaciable…
eterna…